Novena Lección de Fagot, Parte 1. Usar las vocales para controlar la afinación; registros del fagot y vocalizaciones. Por Terry B. Ewell. Traducido por Germán Martínez López. BDP #199.
1.Por el momento conocéis un par de formas de controlar la afinación en el fagot. Recordad los experimentos de articulación de la Lección 3. En esos experimentos conseguíamos una afinación u otra con más o menos aire y con cambios en la embocadura. Si necesitáis repasar esto, solo tenéis que volver a echar un ojo a la Tercera Lección de Fagot.
2.En esta lección os explicaré una tercera forma de controlar la afinación: cambiar las vocales. Esto también se llama “vocalizar”.
3.La mejor forma de ilustrar esto es cogiendo una nota inestable en el fagot, Sib3. Vamos a cambiar la vocal de nuestra boca, desde “i” hasta “ah”. “I” como si sonriéseis y “Ah” como si bostezáseis. Cuando toco la nota no digo la vocal, más bien solo muevo la lengua. Voy a intentar hacer esto sin mover mi mandíbula.
4.¿Habéis oído la diferencia en la afinación? Bueno, obviamente sí. La vocal “i” tiene una afinación más alta que la vocal “Ah”.
5.Ahora, tanto “ah” como “i” representan los extremos del espectro vocal. Hay otras vocales entre estos dos extremos. Creo que la que mejor describe un punto medio es la vocal “u” o la “ü” con diéresis alemana. Se ubica entre los dos extremos.
6.Vamos a practicar esto. Juntad vuestros dientes y haced lo siguiente: empezad con la vocal “ah”; tenéis que ir al otro extremo (“i”), y después volver.
7.Es difícil no mover los labios, ¿verdad? Si no podéis mover la embocadura ni vuestros labios, al hacer la transición entre estas vocales, os podéis hacer realmente una buena idea de las posibles diferentes posiciones de lengua.
8.Ahora, el fagot tiene registros que van desde las vocales más oscuras -yo diría que “Ah” es la vocal más oscura- hasta la vocal más brillante, “i”. La nota más grave que habéis aprendido hasta ahora es Fa grave. Fa grave definitivamente necesita esa “ah”, esa vocal más oscura. Impide que se suba la afinación y crea mayor resonancia. Conforme nos vamos pasando desde ese primer registro hasta pasar por encima del Mi central, tendemos a ir cambiando hacia vocales más brillantes.
9.Cuando lo pienso, no estoy realmente en la vocal “i” cuando llego al Mi central. Tal vez sea más una “u”, la vocal central. Pero cuando llego al Fa central, como es una nota que tiende a estar alta en mi instrumento, tengo que bajarla con una vocal más oscura, parecida a una “ah”. Definitivamente el Fa# y Sol centrales necesitan esa vocal para bajar de afinación, ya que son notas que tienden a subirse de afinación en nuestro instrumento.
10.Luego, rápidamente, para este nuevo registro, el segundo registro del fagot, cambio a la vocal “u”. Está también en el La central. En el Sib y, por supuesto, en el Do4, que está bajo, uso la vocal “i”.
11.Así que hay transiciones. Hay movimiento en las notas que conocéis hasta ahora, desde Fa grave (Fa2) a Mi central (Mi3). Empezamos otra vez en Fa central hasta el siguiente registro: desde “Ah” pasamos por “u” y llegamos a “i”.
12.Voy a tocar una escala de Fa Mayor, una octava y media, para mostrar los cambios.
13.Parte de vuestro desarrollo como fagotistas será el usar vuestro oído para afinar cada nota, conseguir un gran sonido, y conseguir máxima resonancia en la nota. Escuchar cómo la embocadura, aire y vocales cambian cada nota os ayudará a hacerlo.
14.Ahora, os va a llevar muchos años el desarrollar un sonido lleno y tener un gran sonido en todas las dinámicas. Tened en mente que los cambios de vocales, las vocalizaciones, pueden ser una herramienta significativa a usar para la afinación, pero también para los cambios de color.